Reseña: I who have never known men o Yo que nunca supe de los hombres
Un reflejo de la experiencia humana y la mujer.
Esta fue mi lectura de enero y si un solo libro porque es lo que mi cerebro frito puede aceptar por ahora, entre mis metas de 2025 es mejorar aunque sea de a poco eso así que como todo voy de 1 a la vez.
I who have never known men (Yo que nunca supe de los hombres) es una novela distópica de 1995 escrita por la autora belga Jacqueline Harpman que trata de como 40 mujeres que vivian en un búnque donde estaban enjauladas y custodiadas por unos guardias silenciosos.
Les digo que si no les gusta el tipo de libros o historias en las que “no pasa nada” y que son más de seguir personajes entonces creo que no va a ser una lectura amena, pero si eres de los míos puedes con mucho gusto leerlo.
Leyendo sobre la autora para escribir este post me enteré que fue una de los tantos judíos que fueron forzados a escapar y que perdió varios familiares en Auschwitz en la segunda guerra mundial, por lo que digamos que el aftertaste que me había dejado el libro tiene mucho sentido ahora. Para mi habla sobre que nos hace humanos y como mantenernos como tal en tiempos de tragedia. Entonces creo que si es importante esto antes de leerlo, porque si nos da contexto de como ver la novela.
No sabía que esperar del libro en cuanto lo leí, porque no soy de las personas que investigan o leen sinopsis antes de consumir nada, como creo que ya lo dije en el post anterior, creo que es muy popular en booktok pero no estoy tampoco en ese lado de tik tok, así que no sabía que esperar y la verdad terminé disfrutando mucho la lectura, la prosa de Jacqueline Harpman ela siento bastante directa, cosa que no le quita su belleza.
Me parecio bastante interesante como durante toda la trama el tiempo era algo que estaba presente pero del que no sabemos nada, por lo que se describe podemos reconocer que es “moderno” pero no más allá de eso.
El libro lo narra la mujer más joven que no conoce otra cosa más que el búnquer a diferencia de las otras 39 mujeres que aunque vagamente, aún recuerdan su vida pasada y empieza en digamos en cuanto ella despierta su conciencia, al principio es intrigrante sobre como llegaron allí, porqué estan encerradas, que paso afuera y todas estas preguntas te persiguen hasta el final de la novela. Entonces el que lo narre ella es un espejo perfecto del lector, en el que vamos descubriendo este mundo desconocido y creciendo junto con ella, por lo que siento tiene elementos un poco de coming of age.
Como dije, para mi el libro se trata de la humanidad, sobre lo qué es lo que nos hace humanos, los recuerdos, el contexto en el que vivimos, las cosas que aprendemos día a día, las personas que conocemos durante nuestra vida, como moldea el mundo de afuera nuestro “mundo interior”. Al final si lo han leído nunca sabemos que pasó con ellas, ni porque sobrevivieron, sabemos que habían más bunqueres y que no era algo en que el objetivo eran solo mujeres sino que también habian bunqueres donde encerraban hombres.
El libro se siente muy melancólico, sobre todo en la segunda mitad cuando ellas logran salir despues de que una alarma sonara y se apagara, tal cual así lo describen, entonces eran “libres” y empiezan a explorar, puedes escuchar en las historias de las otras mujeres que vamos conociendo de a poco y sabiendo sus nombres e historias, como algunas eran madres o tenian carreras antes de ser secuestradas esa nada, de no poder a volver a ser lo que eran el hecho de que la protagonista muchas veces se sentía aislada en el sentido de que no compartió ese pasado al que tanto añoraban, habia ese sentido de pérdida de una vida que nunca vivió, que le arrebataron.
Como les mencionaba el libro se siente atemporal, por lo que no importa cuando lo leas lo vas a sentir como algo vigente, es como si pudieras leer un espacio liminal, es la misma sensación , como si pudieras leer la nada eso lo hace bastante aterrador de cierta forma.
Si lo leyeron me encaría saber que piensan de este libro, si a ustedes también les puso la mente como un remolino de tanto pensar, tal y como nuestra narradora.